Los diferentes equipos del fútbol base del Real Unión trabajan con el horizonte puesto en comenzar en las próximas semanas a entrenar de cara a preparar la próxima temporada. De ese trabajo de coordinación se encarga, desde hace algo más de dos años, Luis Sánchez Rey. Hablamos con él de la salud que atraviesa el fútbol base del Real Unión, las expectativas que tiene el club con los diferentes equipos y el panorama que se abre en estos tiempos atípicos marcados por el coronavirus.
– ¿Qué labor desempeña exactamente dentro del club?
Llevo dos años y medio como coordinador en el Real Unión. Como la propia palabra indica, me toca coordinar, desde este año desde la etapa juvenil para abajo, antes también el filial. Con la llegada de Gorka Etxeberria esto cambió un poco. Hay que decir que se ha creado un equipo de coordinadores, de tal manera de que en cada etapa formativa tenemos un enlace, un coordinador. Yo siempre digo que me toca asumir la función de entrenador de los entrenadores, supervisar su trabajo, las necesidades que pueden tener en un momento determinado, realizar seguimientos a jugadores tanto del club como de otros clubes… En definitiva, trabajar en el día a día del fútbol base.
– La etapa formativa es importante en esas edades, pero a nadie se le tiene que olvidar que el Real Unión busca, como es lógico, resultados?
Nosotros somos parte de la educación de todo niño o niña que entre en el Real Unión. Lo primero, ante todo, es el aspecto formativo, pero no tenemos que olvidar tampoco el aspecto competitivo. Al final, el Real Unión, como club de Segunda División B y con la historia que tiene a sus espaldas, lo que busca es formar jugadores que puedan llegar al primer equipo. Eso no se nos debe de olvidar. En esta línea de trabajo estamos intentando recuperar categorías. En los últimos años se han perdido categorias, es un dato objetivo, y eso nos ha hecho daño. Ahora creo que estamos trabajando bien, con gente que tiene muchas ganas de hacer cosas. Lo que falta es que acompañe también un poco la suerte.
– ¿Qué ha cambiado con la llegada de Gorka Etxeberria?
Es cierto que con la llegada de Gorka Etxeberria hemos cambiado ciertas cosas, manteniendo el trabajo que hasta ese momento estaba haciendo yo, pero marcando ciertas pautas que creo que eran necesarias. Yo diría que es un proyecto a corto-medio plazo. No me voy a aventurar a decirte que este año vamos a subir en algunas categorías. Creo que lo primordial es hacer un buen trabajo con los chavales, formarlos bien, que los entrenadores les aporten sus conocimientos. Y seguramente, más pronto que tarde, veremos resultados.
– El club acaba de anunciar acuerdos con otros clubes de fútbol de la ciudad. Era un paso que se pedía a gritos y que estaba tardando en darse…
Yo al Real Unión entré por mediación de Eneko Romo. En una reunión que tuvimos estando yo de coordinador en el Behobia empezamos a hablar de cómo estaba el fútbol en Irun. Yo era muy crítico con cómo se estaba llevando el fútbol en Irun. No solo hablo del Real Unión, hablo en general, aquí todos tenemos culpa. No sé si le gustó lo que le comenté, pero el caso es que a los dos días me volvió a llamar y me ofreció entrar. Una de las cosas que nos planteamos fue el llegar a acuerdos con los clubes de Irun. Yo tengo claro que no podemos ir cada uno por un lado. El bien que puede ser para el Real Unión creo que es el bien común, el bien para todos, lo creo así sinceramente. Y ha costado, no niego que ha costado, porque en esta historia, como en todo en la vida, había gente que tenía sus dudas, pero creo que la figura de Gorka Etxeberria nos ha ayudado a terminar de dar esos pasos y que veamos ahora los frutos. Con el Mariño, el San Marcial y el Landetxa hay ya acuerdo, creo que lo habrá también pronto con el Behobia. Nos faltaría el Dunboa-Eguzki, con el que las cosas no fluyen como nos gustaría, pero estos acuerdos son positivos, sin duda.
– Una última… ¿arrancarán las competiciones el año que viene en lo que al fútbol base se refiere?
Pues, sinceramente, no sé qué contestarte. Es que cada día hay algo nuevo. Lo de hoy mañana no vale. Lo de mañana se cambia al día siguiente. Y además estamos pendiente de cómo va evolucionando también la situación, que nadie sabe a ciencia cierta. La palabra sería incertidumbre. Lo que te puedo decir es que nosotros estamos trabajando con el horizonte de que en septiembre puedan empezar las competiciones. Se está hablando incluso con los chavales para que empiecen a realizar entrenamientos preventivos, con la idea de comenzar en agosto las pretemporadas… pero, si me preguntas, a día de hoy, cuál es mi opinión, yo dudo mucho de que en septiembre tengamos una normalidad como para poder empezar las competiciones. Es cierto que, en su día, desde la federación, se nos marcaron tres posibles escenarios. Pero yo, la verdad, sigo siendo escéptico. Ójala me equivoque porque sería una buena noticia empezar, no solo por la práctica del deporte, sino porque significaría que a nivel de salud estamos mejor. Ojalá me equivoque.