El unionista Mario Capelete reconoce que lleva bien el confinamiento, aunque empiezan a pesarle los días encerrado en casa. Mientras intenta mantener la forma con los ejercicios que les ha preparado el cuerpo técnico, mira de reojo qué es lo que va a ocurrir con las competiciones. En el caso del Real Unión, con un descenso en juego, a falta de diez jornadas todavía por disputarse.
– ¿Cómo lleva estas semanas de confinamiento?
Bastante bien. Soy una persona a la que le cuesta agobiarse así que, en ese sentido, no tengo problemas por estar metido en casa. Es verdad que a medida que van pasando los días cuesta más quedarse en casa, pero tengo salud y los míos también la tienen y a día de hoy eso es lo importante, sobre todo viendo la situación y la cantidad de fallecidos que hay. Estamos en una situación muy complicada.
El día a día es muy parecido siempre, con una rutina de ejercicios que el preparador físico nos manda desde el club, además de hacer cosas que uno tiene pendiente. Yo, por ejemplo, estoy coordinando también cosas del fútbol base y adelantando trabajo. Pero no me puedo quejar, lo llevo bastante bien.
– Parece que con la desescalada anunciada por el Gobierno central en unos días van a poder retomar los entrenamientos, de manera escalonada, primero de forma individual y luego ya como grupo. Es un alivio después de todo este tiempo sin poder pisar el césped…
Sí, el poder entrenar y el poder competir es lo que más hecho de menos, porque el resto de cosas, aunque estemos confinados, puedes hacerlas: hablar con la familia, con los amigos, hacer videollamadas…. A mí me apasiona el fútbol, no solo jugarlo, también verlo, y no puedo hacer ninguna de las dos. Parece que dentro de no mucho podremos de nuevo hacerlo así que estoy contento por esa parte.
– ¿Qué cree que va a pasar con la competición finalmente?
No sabría decir, la verdad. Me da la sensación de que de Segunda División B para abajo no se va a competir. En Primera División y en Segunda División creo que sí, pero por un tema más económico que otra cosa. Al final en estas categorías se mueve mucho dinero por las televisiones y en Segunda B y en Tercera no se mueve tanto. Creo que lo primero tiene que ser la salud, viendo lo que está pasando y la cantidad de fallecidos que está habiendo y el fútbol tiene que pasar a un segundo plano, por mucho dinero que se mueva.
Reconozco, eso sí, que lo justo sería jugar, para saber qué es lo que mereces. Si acabas en descenso es porque lo mereces y si quedas primero es también porque lo mereces. Descender a un equipo quedando todavía 30 puntos por jugar o ascender a otro es injusto. Es obvio que para aquellos que tengan que decidir va a ser complicado y que habrá equipos perjudicados porque es una situación crítica, pero habrá que intentar que sean los menos posibles.
– ¿Usted como resolvería los ascensos y descensos?
Es una buena papeleta, pero para eso hay unas personas que entiendo que están capacitadas para hacerlo y quiero creer que tomarán la decisión más acertada. Como he dicho creo que pase lo que pase va a haber equipos perjudicados. En el caso de los ascensos, por ejemplo, hay en grupos donde el segundo está empatado a puntos o muy cerca del primero. En el caso de los descensos, quedan 30 puntos en juego y no sabes todavía qué puede pasar. ¿Cómo lo resolvería? O declarar el año nulo o aplicar lo que parece que se quiere hacer, que haya ascensos pero no descensos. Descensos desde luego no haría. Piensa que habrá equipos que habrán realizado una inversión económica para fichar y salir de la situación en la que estaban y que faltan 10 jornadas por jugarse. Es muy complicado.
– ¿Qué opinión le merece esa nueva categoría intermedia por la que apuestan algunos clubes?
Es algo que ya se venía comentando años atrás. Todo lo que sea profesionalizar las categorías me parece bien. Ojalá el día de mañana la Tercera División pueda estar también más profesionalizada. Es algo positivo, pero llevarlo a cabo ahora… creo que tiene que ser algo muy pensado, no puede ser como una solución al problema que tenemos ahora. Si se hace tiene que hacerse bien. No me parece una mala idea.
– ¿Qué es lo primero que hará cuando termine el estado de alarma?
Muchas cosas. Lo primero será juntarme con muchos de los amigos con los que he hablado para hacer una buena cena, juntarme con los míos, entrenar, competir… Nada que no hiciera antes del confinamiento, pero sí disfrutando de estos momentos, teniendo en cuenta que de la noche a la mañana te puede pasar algo como esto. Antes igual no valorábamos tanto ir a una terraza a tomar algo, por ejemplo, y a partir de ahora estas cosas las vamos a valorar mucho más.